18/04/2018 - El pasado viernes tuvo lugar la presentación del proyecto de extensión denominado “Formación Académica Interdisciplinaria y Cannabis para uso medicinal” que articulará el trabajo de las tres unidades académicas de la UNICEN en Olavarría junto a organizaciones sociales.

cannabisintReferentes universitarios y de instituciones sociales presentaron el proyecto de Extensión Universitaria denominado “Formación Académica Interdisciplinaria y Cannabis para uso medicinal”. De la iniciativa forman parte las Facultades de Ingeniería y de Ciencias Sociales, la Escuela de Ciencias de la Salud (todas pertenecientes a la UNICEN), Cannabis Activa Olavarría y CAMEDA (Cannabis Medicinal Argentina), y apunta a nuclear información avalada por cada una de las instituciones, difundirla, y generar cursos de formación para profesionales de la salud.

En diferentes ámbitos, cada organismo aborda la temática del consumo de derivados cannábicos con fines medicinales, a su manera. El 29 de marzo del 2017, con la aprobación de la ley 27.350 que permite la investigación médica y científica de uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados, los diversos actores comenzaron a sentir una responsabilidad social sobre la información que circulaba. “Creímos que ameritaba poner sobre la mesa algunos discursos en conjunto, sobre todo atendiendo a la génesis del debate”, expuso el director del proyecto, Dr. Gastón Barreto.

“El proyecto pretende aportar nuevas miradas sobre la capacitación profesional, divulgación y reducción de riesgos, con un equipo de investigadores provenientes del campo de la química, la ingeniería, la psiquiatría y la antropología social”, señaló Barreto, quien además es secretario de Extensión, Vinculación y Transferencia de la FIO.

De la presentación participaron también el Dr. Marcelo Sarlingo docente e investigador de Sociales y Salud en el área de bioética, la psiquiatra Lucía Lizaso docente de Salud, y Emilio Hurtado por Cannabis Activa Olavarría. La referente de CAMEDA es su presidenta Ana María Nicora.

El Dr. Marcelo Sarlingo consideró que “hay un fenómeno. Por un lado una gran cantidad de acciones fragmentada en diferentes niveles. Gente que demandaba más que nada una contención desde el padecimiento que estaba sufriendo. Personas con diferentes enfermedades que desde el ámbito de la medicina biomédica no tenía respuesta, y a lo largo de diversas iniciativas, pudo producir un impacto en el plano legal y lograr que se sancione una ley donde el uso medicinal del cannabis empiece a ser legal y no sea una cuestión que directamente ubica a la persona que lo usa en el plano de la delincuencia. Ese ha sido un gran cambio que se dio”, remarcó.

“Lo que intentamos hacer es rescatar información, tratar de ordenarla, en un sentido en que sea transmisible fácilmente. Que no permanezca exclusivamente en un lenguaje científico sino que pueda ser utilizada por personas con una necesidad real de hacer un uso medicinal del cannabis, y hacer circular un tipo de conocimiento que también es útil para la academia, porque la fuente del conocimiento social no son exclusivamente científicas sino que hay prácticas sociales que aportan una gran experiencia y prácticas que es interesantísimo conocer. Sobre todo cuando apunta a que personas que están sufriendo sufran menos”, dijo el antropólogo.

Por último, agregó que el otro plano social interesante es la formación de la gente que trabaja en la salud, el sistema de salud y otras áreas conectadas. “Desde ese lugar, este tipo de conocimientos sobre prácticas sociales que han emergido es interesante. Su difusión, su comunicabilidad, y el abordaje interdisciplinario nos resulta novedoso, ya que vendría a ser una de las primeras experiencias en la cual las tres facultades pueden confluir en un ámbito colaborativo”.

En tanto, Lucía Lizaso se refirió particularmente a la formación del personal de salud. “La idea es ampliar el conocimiento, que el personal de salud esté formado sobre el uso de cannabis medicinal, ya que hasta ahora no había ni cursos de formación. La idea es que la Escuela incorpore información en esta área y personas que ya se recibieron amplíen su conocimiento y separarlo del uso problemático. Es un nuevo abordaje que resulta útil en el tratamiento de muchas enfermedades bien específicas, bien indicado”.

Finalmente, Emilio Hurtado habló como representante de Cannabis Activa Olavarría, agrupación que lleva un año trabajando en la ciudad. “Parte de este proyecto es interesante porque tiene que ver con la concientización de los riesgos de obtener este derivado en el mercado ilegal sin trazabilidad, por eso nos pareció interesante formar parte. Salir del mercado ilegal y encontrar respuestas diferentes, ver como el estado va a dar una respuesta a esta problemática”, concluyó.